La Corte Constitucional italiana se pronuncia: lo que significa (y lo que no) para los descendientes de italianos
¿De qué se trata esta decisión? Corte constitucional ciudadanía italiana ley 91 de 1992
Corte constitucional ciudadanía italiana ley 91 de 1992. El 25 de julio de 2025, la Corte Constitucional italiana, reunida en pleno, dictó una sentencia muy esperada por quienes siguen de cerca los debates sobre el derecho a la ciudadanía italiana iure sanguinis y la controvertida reforma de 2025. Esta decisión responde a una serie de cuestiones de legitimidad constitucional planteadas por tribunales de Milán, Roma, Bolonia y Florencia.
El objeto central del debate era la posibilidad de limitar judicialmente el derecho a la ciudadanía por vía sanguínea, en particular ante las reformas legislativas que pretenden imponer cortes generacionales y requisitos de exclusividad nacional, como los planteados en el Decreto Ley 36/2025.
¿Cuál fue el resultado?
La Corte:
- Declaró inadmisibles las intervenciones de AUCI (Abogados Unidos por la Ciudadanía Italiana) y AGIS (Asociación de Juristas Iure Sanguinis), por no tratarse de partes procesales legítimas en la causa.
- Rechazó por inadmisibles las impugnaciones del artículo 4 del Código Civil de 1865 y del artículo 1 de la Ley n.º 555 de 1912, al considerar que las cuestiones planteadas no cumplían con los requisitos técnicos para ser evaluadas.
- Declaró no fundadas las cuestiones de constitucionalidad del artículo 1, párrafo 1, letra a) de la Ley 91 de 1992, relacionadas con la transmisión de la ciudadanía italiana.
¿Qué significa esto realmente?
La Corte Constitucional NO declaró inconstitucional la Ley 91/1992. Tampoco limitó el principio de transmisión de la ciudadanía italiana por sangre ni habilitó el acceso automático a la ciudadanía para bisnietos o generaciones más lejanas por vía administrativa.
Por el contrario, confirmó la plena vigencia del artículo 1 de la Ley 91/1992, que permite la transmisión de la ciudadanía italiana sin límite generacional, mientras no haya una ley vigente que indique lo contrario.
Esto implica que el derecho a la ciudadanía por ius sanguinis sigue siendo válido y operativo bajo las reglas históricas y constitucionales, siempre que no haya una reforma legislativa formal que lo modifique.
Corte Constitucional ciudadanía italiana Ley 91 de 1992: implicancias concretas
- El derecho a la ciudadanía italiana por iure sanguinis sigue vigente para todos los descendientes.
- No se abre vía administrativa automática para bisnietos: no podés hacer el trámite en el consulado si no cumplís con los requisitos actuales (como tener turno previo al 27/03/2025 o trámite activo).
- La Corte rechazó los intentos de cambiar la ley por vía judicial, pero deja abierta la puerta a futuras acciones contra la Ley 74/2025.
¿Por qué esta sentencia fortalece la vía judicial contra la Ley 74/2025?
Porque confirma que solo una ley formal del Parlamento puede cambiar el régimen de transmisión por sangre. Aunque el Parlamento ya ha aprobado el Decreto 36/2025 como Ley 74/2025, estableciendo límites generacionales retroactivos que excluyen a bisnietos y generaciones más lejanas, esta sentencia marca un precedente: la Corte no limitó el derecho a la ciudadanía iure sanguinis en sede constitucional.
Esto quiere decir que si la Corte no declaró inconstitucional el artículo 1 de la Ley 91/1992, las restricciones impuestas por la nueva Ley 74/2025 pueden ser cuestionadas judicialmente por contradecir principios constitucionales.
Además, el fallo refuerza la doctrina del «derecho de estatus»: la ciudadanía italiana es parte de la identidad jurídica del individuo y no puede ser regulada arbitrariamente por normas de menor rango. Cualquier restricción debe ser proporcional, razonable y aprobada mediante el debido proceso legislativo.
En resumen: la sentencia fortalece la estrategia de juicios por inconstitucionalidad frente a la nueva normativa que pretende restringir el acceso a la ciudadanía por generaciones lejanas.
Una aclaración necesaria. Corte constitucional ciudadanía italiana ley 91 de 1992
La decisión de la Corte no significa que ahora los bisnietos o tataranietos puedan solicitar su ciudadanía en cualquier momento. Sigue siendo necesario cumplir con los requisitos vigentes, como haber iniciado el trámite antes del 27/03/2025 o tener un juicio activo. Pero refuerza el derecho histórico y debilita los fundamentos constitucionales de la Ley 74/2025.
En otras palabras: no habilita trámites administrativos automáticos, pero sí abre una puerta judicial sólida para impugnar la reforma actual.
📅 Situación actual de la ciudadanía italiana
- Sigue vigente la Ley 91 de 1992, pero modificada sustancialmente por la Ley 74/2025.
- La nueva ley impone corte generacional y excluye a bisnietos, salvo juicios judiciales.
- La única vía posible hoy para bisnietos o generaciones más lejanas es el proceso judicial en Italia.
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