Nuevas restricciones a la ciudadanía italiana 2025: análisis del DDL n. 1450/2025
1. Contexto general de la reforma. Nuevas restricciones a la ciudadanía italiana 2025
Nuevas restricciones a la ciudadanía italiana 2025. El DDL n. 1450/2025, actualmente en debate parlamentario, surge como continuidad del Decreto Tajani (D.L. 36/2025) y representa un endurecimiento estructural de la Ley 91/1992.
El objetivo político declarado es limitar el acceso a la ciudadanía italiana iure sanguinis de las generaciones nacidas en el extranjero, bajo la premisa de reforzar el “vínculo efectivo” con Italia.
En la práctica, este proyecto introduce nuevas restricciones a la ciudadanía italiana 2025 que impactan directamente en descendientes de italianos en Argentina, Brasil y otros países de fuerte emigración.
2. Principales cambios jurídicos con las nuevas restricciones a la ciudadanía italiana 2025
2.1 Reconocimiento por nacimiento y adopción
El hijo nacido en el extranjero no será considerado ciudadano italiano iure sanguinis si:
- Sus padres italianos también nacieron fuera de Italia.
- Sus padres no residieron en Italia al menos 2 años antes de su nacimiento.
- Sus abuelos también nacieron fuera de Italia.
👉 Esto implica que gran parte de la diáspora —ya en tercera o cuarta generación— podría quedar excluida.
2.2 Menores extranjeros y apátridas
Los menores extranjeros o apátridas solo adquieren ciudadanía si:
- Los padres declaran expresamente su voluntad.
- El menor reside legalmente en Italia durante al menos 2 años.
Esto introduce una condición de residencia que antes no existía y que dificulta el acceso.
2.3 Ciudadanía por matrimonio
Se elimina la posibilidad de adquirir la ciudadanía tras 3 años de matrimonio residiendo en el extranjero.
Ahora, solo quienes residen en Italia mantienen acceso, lo que refuerza la lógica territorial de la reforma.
2.4 Procedimientos y plazos
- 48 meses como plazo máximo para tramitar expedientes.
- 12 meses para ejecutar sentencias de ciudadanía tras quedar firmes.
Esto oficializa las demoras consulares y abre la puerta a caducidad de solicitudes si no se resuelven en 4 años.
2.5 Pérdida por falta de vínculos efectivos
El punto más polémico:
- Un italiano nacido en el extranjero con otra ciudadanía pierde la italiana si durante 25 años no mantiene vínculos efectivos (inscripciones, ejercicio de derechos, residencia).
- Se presume la pérdida si no se transcribe el nacimiento antes de cumplir 25 años.
👉 Esta cláusula afecta directamente a segundas y terceras generaciones que nunca inscribieron sus actas.
2.6 Residencia legal y renuncias
- Se especifica que la residencia debe ser “legal” y continua.
- Presunción de renuncia si la residencia en Italia es menor a 2 años.
Esto endurece aún más la naturalización y dificulta el cumplimiento de requisitos.
2.7 Transmisión a menores
La transmisión automática solo se aplica si el menor reside legalmente en Italia al menos 2 años.
Esto limita el acceso iure sanguinis de hijos nacidos en el extranjero.
2.8 Costos y tasas consulares
- La tasa consular pasa de 600 € a 700 € por solicitud.
- Una parte de lo recaudado se destina directamente al Ministerio del Interior, reforzando la presión económica sobre los solicitantes.
3. Impacto práctico de las nuevas restricciones a la ciudadanía italiana 2025
- Endurecimiento del ius sanguinis
- La reforma busca cerrar progresivamente el reconocimiento a descendientes nacidos fuera de Italia con doble nacionalidad.
- Carga para consulados y solicitantes
- Los plazos de 48 meses consolidan la lentitud actual.
- Riesgo de expedientes archivados por caducidad.
- Concepto de vínculo efectivo
- Genera riesgo de pérdida masiva de ciudadanía si no se mantienen inscripciones o documentación.
- Obliga a las familias a extremar la conservación de actas y la actualización en consulados.
- Mayor costo económico
- El aumento de tasas a 700 € supone una barrera adicional.
- Conflicto con la jurisprudencia constitucional
- El ius sanguinis ha sido considerado un derecho originario e imprescriptible.
- Estas restricciones probablemente generen una ola de litigios y recursos judiciales.
4. Conclusión técnica sobre las nuevas restricciones a la ciudadanía italiana 2025
El DDL n. 1450/2025 marca un antes y un después en la normativa italiana:
- Plazos más rígidos (48+12 meses).
- Restricciones sustanciales al ius sanguinis.
- Pérdida de ciudadanía por “falta de vínculos efectivos”.
- Tasas consulares más altas (700 €).
⚠️ Estamos ante un escenario de cierre progresivo de la ciudadanía italiana iure sanguinis, que impactará en millones de descendientes en América Latina.
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